El trauma de un vecino de Cantabria con su casa de dos plantas que "paraliza" a su perro: le da un poco de miedo
Es el testimonio de un 'Fósforo' que, respondiendo al tema del día en el 900.50.60.06, no ha dejado indiferente

El trauma de un vecino de Cantabria con su casa de dos plantas que "paraliza" a su perro: le da un poco de miedo
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Queremos hablar con nuestros 'Fósforos' sobre historias paranormales. A las que no encuentran respuesta. Y nos responden, como siempre, en el 900.50.60.06. Es el tema del día que les proponemos.
El primer oyente, llamado Enrique, nos cuenta que vive en Cantabria. En una casa muy antigua. Era del maestro. Tiene dos plantas. En la parte de arriba oye ruidos. Puertas cerrarse. Pero lo que le da un poco de miedo, "es que he tenido tres perros y ninguno de los tres han subido a la planta de arriba. No hay manera".
Mauri, inmediatamente después, llama desde Bilbao.

Coches en el centro de Bilbao
Es de origen colombiano. Dice que el vecino más próximo que tenía... era a 2 horas del camino. Le mandó su abuela a recoger cosecha. Se le hizo de noche. Al volver, tenía que cruzar un bosque. "Sentía que había alguien detrás de mí. Echaba a correr y sentía más pasos. Solté todo lo que tenía en la mano. Y resulta que los pasos eran las guayabas que se caían detrás de mí".
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¿Y qué le pasó a César? Responde que, hace tiempo, una tía de su mamá falleció. Al cabo de los meses, soñó con ella "y me decía que ya había conocido a su hijo. Pasan los días. Fui a casa de mis padres. Les conté eso. Mi madre me dijo que se fue a trabajar a Sudamérica. Allí se quedó en estado, dejó allí al niño y se volvió para España. Yo no sabía nada. Y en sueños sé esto, lo exteriorizo, y me contaron toda la historia".
Hablamos también con Jesús. Este 'Fósforo' nos habla desde un pueblo de Córdoba. Fue con unos amigos a ver una procesión un Viernes Santo. Se hicieron una foto. En esa instantánea, en el fondo, "salía una mujer que había fallecido. Al fondo de la foto. Nos impactó a todos. Se lo dijimos a la familia, con respeto".
"me dijo que tenía la marca de una mano y yo no le di importancia"
Ángel, por otro lado, explica que fue a la playa. Un día cualquiera. Estuvo todo el rato debajo de la sombrilla. Estaba orientación sur, de cara al sol. Y, cuando llegó a casa, le dijo a su mujer que notaba como si se hubiese quemado la espalda. "Yo nunca me pongo al sol. Le dije que me pusiese aftersun. Me dijo que tenía la marca de una mano. Yo no le di importancia", relata. Al día siguiente, pidió un espejo para verlo.

Una imagen de la playa de Salinas, una de las más concurridas de Asturias
Era una mano "con los cinco dedos perfectamente puestos. Y digo: '¿pero qué explicación tiene esto?'. Tenía la sensación de que me había quemado. Pero es que yo estuve todo el rato sentado bajo la sombrilla y de frente al sol. Explicación, ninguna. Fuimos a preguntarlo a una vidente y me dijo que 'me habían trabajado'. Toda mi familia se quedó asustada".
Por último, cabe destacar que también hemos recogido el testimonio de otro 'Fósforo', llamado Jesús. Como el anterior oyente. Su caso es el siguiente.
Durante 35 años, ha trabajado en países como África. Siempre se traía recuerdos. Regalos, etc. Hace una década, su hermano decidió coger 7 máscaras de esos países para decorar su casa y "a la semana de colocarlas, mi sobrino se reía mucho al verlas. Tenía 3-4 años. Señalaba a una esquina donde estaban los juguetes. Decía que el niño era muy moreno. Mi hermano se 'acojonó' y quitó todas las mascarillas".