El cielo y la tierra se unen en Tomelloso, Ciudad Real: "Está moviendo cada corazón"

La Noche Blanca llega a Tomelloso con “La revolución del amor” y un mensaje de esperanza. El evento, con entrada libre, cuenta con la participación de reconocidos artistas y comunicadores cristianos.

El colegio Santo Tomás-La Milagrosa es el escenario de esta velada en la que la música y el testimonio personal invitan al encuentro con Cristo en la Eucaristía. Su fundador, Guelmis Tavarez, músico dominicano que viene desde Nueva York para volver a exportar este encuentro como ya hizo hace quince años con su venida a España: «La primera vez que se realizó Noche Blanca en España fue en la diócesis de Córdoba. 

A través de Jesús Cabello conectamos, ellos tenían ahí el sínodo para los jóvenes y el obispo Don Demetrio también quiso llevar la Noche Blanca como parte de ese sínodo para ellos. Fue noviembre del año 2019 cuando se vivió la primera Noche Blanca en España, en la ciudad de Córdoba».

«Fue un poco experimento porque no sabíamos cómo iban a reaccionar los jóvenes ante esta forma tan peculiar de alabar a Dios y de rezar. Y los frutos de todo aquello han sido vocacionales, de sanación, han sido encontrar en la fe la certeza de que hay un Dios que nos ama y que nos hace familia. Una experiencia altamente recomendable para todos aquellos que están buscando a Dios en su vida», añade Jesús Cabello.

Se trata de una noche de oración, celebración festiva de la fe y música, en la que además de Guelmis Tavarez participan otros artistas como Jesús Cabello, Aisha Ruah y Praystation. Bajo el lema “Viva la esperanza”, y con entrada libre, esta noche está atravesada por un deseo: dejarse impregnar por la revolución del amor. 

Se trata de una vivencia intensa de fe que llevar a transformar la vida, como afirma Jesús Cabello: «La música, y sobre todo la música en un ambiente festivo, en un ambiente de alabanza, de gritar el nombre de Jesús, de gritar que Dios es grande, que nos ama... reporta en el corazón de todos los que asisten una riqueza muy grande. Yo creo que aparte de todo lo espectacular del evento, hay algo real que se está moviendo en cada corazón y que hace que la vida del que participa tome quizá un rumbo diferente. No es solo emoción transitoria, sino un fruto que dura para toda la vida».

A través de la música, del testimonio, de la cercanía al Señor hecho pan en la Eucaristía, los participantes van a vivir un Pentecostés lleno, seguro, de la presencia del Espíritu, del consolador, de la promesa del Señor tras su resurrección.

El 450 aniversario de la parroquia de la Asunción. Los organizadores confiesan que el objetivo es “llenar de luz y alegría el corazón de Tomelloso”, en esta noche que acerca el Cielo a la tierra. Así lo cuenta Guelmis Tavarez: «Lo central en la Noche Blanca es el encuentro personal con el Señor Jesús en el Santísimo Sacramento de la Eucaristía. Es un camino hasta llegar ahí, hasta llegar a sus pies en un momento de oración, de entrega, de contemplación. Noche Blanca es como el foco que dirige a la presencia de Jesús en la Eucaristía. Ahí se define todo. Por eso se une el cielo con la tierra en ese momento».